Límites y disciplina en los adolescentes

martes, 16 de julio de 2013


En lineas generales la adolescencia suele ser un período de desarrollo personal que tiende a relacionarse con la Rebeldía. Digo en líneas generales porque por suerte, de momento...shhhhh, no me encuentro en esta situación en casa.

Muy posiblemente haya quién me tilde de desnaturalizada por afirmar lo que voy a decir, bueno, escribir.... Que es peor, porque lo escrito ahí queda....

Si un adolescente se comporta de forma inadecuada los padres tendemos a castigar, pero hemos de tener claro que podemos caer en el tremendo error de que el castigo esté presente casi a diario en su vida.

Lo que como padres hemos de conseguir es que el adolescente, después de una conducta incorrecta sea capaz de reflexionar  y así evitar conductas repetitivas.

¿Dejarlo sin privilegios? , pues hombre, esto funciona en dos o tres ocasiones, no más. El ya famoso "te dejo sin......", pero si lo usas a menudo lo que pasará es que llegará un momento en que el adolescente ya no "tenga nada" y por lo tanto no reaccione.

Lo "ideal" y "de manual" , que no lo mismo que fácil, es que la consecuencia pedagógica sea educar; además así nos ahorramos traumas futuros.  Los adolescentes están necesitados de límites, límites que impliquen un grado de esfuerzo.

No debemos olvidar que los padres hemos de trabajar muy duro para ser un anclaje emocional, un referente, que nos tengan respeto, admiración y confianza... Así que olvidemos el rollito de "yo soy amiga de mi hija" NOoooooo, nuestros hijos ya tienen a sus amigos, nosotros tenemos otra función, hemos de dar esa sensación de que lo tenemos todo controlado, de que llevamos el timón y no nos tambaleamos.

Por lo que un No es un No.

Hemos de hacer un buen uso de la coherencia, la firmeza y ser consecuentes.

El  castigo (palabra que no suele gustar) ha de ser excepcional, coherente, y acorde a la falta cometida...ha de ser disuasorio, no han de tener cabida las amenazas, las faltas de cariño, de respeto y desde luego,ha de ser cumplibe, si a todo ello le sumamos que nunca hay que levantar el castigo..... Se ha de cumplir a raja tabla, sino flaco favor le hacemos a la finalidad del mismo y al propio adolescente, que se puede llegar a tomar a pitorreo nuestros castigos en un futuro.

Pero, que difícil poner límites en el tiempo que vivimos en los que muchos adolescentes lo tienen todo ilimitadamente no???????  ....

Como madre de una pre adolescente os diré que no es tarea fácil educar y poner esos límites; ni que decir tiene que hay ocasiones en las que toda la verborrea que os he "vomitado" parece caer en el olvido de forma momentánea.... Pero intento hacerlo bien. También es verdad que es de recibo decir que mi hija es buena niña..... De momento....

Lo que si os puedo afirmar es que tengo, tenemos más que asumido que la educación es tarea de los padres; los centros escolares enseñan conocimientos, buenas conductas y en ocasiones ética; pero la educación en valores, límites y responsabilidades corre de nuestra cuenta.... Es un compromiso el cual empieza desde el momento en el que decidimos convertirnos en padres.

13 comentarios:

  1. tomo nota para el futuro.
    Me gusta mucho tu último párrafo, creo que habría que decirlo más veces, hay mucha gente que no lo tiene claro.

    ResponderEliminar
  2. Ayyy Beuchi qué miedo me da esa etapa! Lo peor es que lo que más me preocupa de esa etapa no es mi hija, sino yo mismo! Uno tiene tendencia a la exigencia... que no deja de ser lo que he vivido toda mi vida y los resultados no fueron malos.

    Y que la educación y valores los aporta la familia es una verdad como un templo, que nadie se engañe.

    Un abriiizo!

    ResponderEliminar
  3. Aún me queda mucho, pero creo firmemente que las bases hay que asentarlas desde ya.
    Es una reflexión genial, meditada y trabajada.

    Sabias palabras.. Y post para la posteridad.

    Un besazo amore

    ResponderEliminar
  4. Por supuesto que no es fácil educar, ni poner límites, ni decir no, pero como padres es lo que nos toca.
    Y hay que hacerlo desde pequeños, así cuando crecen y entran en la adolescencia en la que todo es pedir y siempre con la coletilla "a fulanita le dejan y ¿porqué a mi no?" tengan claro que cuando en casa decimos No es no, y si la hora de recogida es las 9 son las 9 no las 9.15, porque entonces habrá consecuencias.
    Claro está que la educación en valores, responsabilidades y límites la debemos dar los padres no el colegio, el colegio educa en conocimientos y juntos, padres y colegio podemos educar en valores, pero la obligación la tenemos los padres no el colegio.
    Besinos

    ResponderEliminar
  5. Gracias por esta reflexión Bea! Pienso lo mismo y aunque todavía falta, como dijo Majo, las bases desde ahora!!!

    Un besote hermosa!

    ResponderEliminar
  6. Sabrás que el tema me asusta. Como adolescente me porté fatal con mis padres y creo que se debe a eso que dices sobre el abuso del castigo. He leído sobre el tema de la disciplina para hacerlo "correctamente" con mi bebo de 3 años que se cree que se manda. ;-) Gracias por el tip de no abusar de eso e invitarlo a la reflexión. Saludos desde Puerto Rico.

    ResponderEliminar
  7. Yo creo que los límites han de aplicarse desde pequeños para que lleguen a adolescentes con las ideas claras sobre lo que está bien y no. Para mí es fundamental ponerlos, aunque sé que no está de moda esto, porque además los niños los necesitan para aprender, no es nada malo.

    Un besote Bea

    ResponderEliminar
  8. Hola guapa!!

    Yo estoy de acuerdo, y además creo, lógicamente en diferente medida... que la metodología a fin de cuentas es la misma siendo infantiles que siendo adolescentes. El castigo pedagógicamente hablando siempre, siempre ha de ser el último recurso.

    Yo estoy más en la línea de explicar cuáles son las consecuencias de un acto. Si haces esto, pasará esto otro ¿Qué conseguimos así? Pues que sean consecuentes en que si toman una decisión, están asumiendo también la consecuencia. Las primeras veces quizá cueste, pero después sabrán, que entre tomar una dirección u otra cambia el resultado y las consecuencias de las cosas, que ojo!! no tienen por qué ser negativas. Consecuencias = Resultados, sean buenos o malos.

    El diálogo es importante, mucho. Pero hay edades... en las que el diálogo es más bien un monólogo. Quizá es que los padres tengamos esa lección pendiente de ESCUCHAR, saber lo que quieren... Yo tengo la sensación de que mis padres nunca me preguntaron qué es lo que yo quería, cuál era mi opinión. Cuando te sientes parte de algo te implicas mucho más ¿No crees? No se trata de hacer colegueo... que ahí también estoy de acuerdo ¡ellos ya tienen sus amigos!

    Bueno, que me enrollo... has tocado mi fibra sensible y me sale el ramalazo de la futura educadora infantil que seré dentro de unos 6 ó 7 años jamía. jajajajajaja

    Un besote!!

    ResponderEliminar
  9. Pedazo de post!! Compendio de los compendios, extracto de cine de un montón de manuales sobre adolescentes que abarrotan el mercado. Estoy totalmente de acuerdo contigo. Nada de colegueo, seriedad, pero cimentada sobre una base firme de diálogo. Mucho diálogo. Para mí la clave es como dices inculcar valores a nuestros hijos... y fundamental el respeto. Tienen que respetarnos, tenemos que conseguirlo. Porque esa es la base sobre la que pivotará todo en un futuro. Y eso no se consigue a base de castigos, gritos o amenazas. Eso provoca miedo, no respeto. El respeto se consigue siendo un modelo coherente, un referente cálido, un ejemplo a seguir y al que acudir ante los problemas. El cómo lograrlo... iremos investigando cada día...
    Estoy segura que con nuestra tribu, todo será mucho más fácil!!
    Un beso hermooooosura!

    ResponderEliminar
  10. Yo en mi adolescencia era un pelín rebelde (bueno bastante). Me molestaba todo lo que hacían o decían mis padres y sólo me importaba mis amigos. Ese período me duró unos dos años pero afortunadamente eso pasó. Espero que mi hija no se parezca a mí en eso. Feliz día

    ResponderEliminar
  11. Es mi forma de entender también la educación en la familia, y no creo que eso suponga que seamos desnaturalizadas, verdad? De hecho yo creo que podemos establecer un apego emocional seguro valiéndonos de las normas y los límites, tal y como tú estableces...
    Es más, creo que la falta de su uso genera conflictos familiares que estoy pudiendo apreciar en familias que tienden a no usarlos por su forma de entender la crianza...
    Me gustó tu texto! :)
    ¡Mamá qué sabe!

    ResponderEliminar
  12. Muy buen post... me falta unos años aún para que mi jija sea adolscente, pero con ella pienso aplicar lo que han aplicado mis padres, y mi adolescencia fue muy dura...
    Ellos siempre me decían que el mayor privilegio que tenía yo era la confianza de ellos, y que esa confianza me daba la libertad... y que era la única responsable de la misma..
    Si las deciciones que tomara, en cuanto a conducta, o elecciones, traicionaban la confianza que ellos depositaban en mi, la libertad sería lo primero que se vería afectado..
    Suena de locos, pero no me ponían límtes o prohibiciones, como fumar, o beber.. pero al no tener esta prohibición como adolescente nunca sentí la necesidad de cruzar ninguna línea.. porque mis padres confiaban en mi... y lo más importante siempre me decían, que cualquier cosa que pasara, tenía el derecho a equivocarme y me apoyarían..
    Espero poder seguir con el mismo ejemplo de cara a mis hijas... =)

    ResponderEliminar
  13. tienes toda la razón.
    No somos amigos de los hijos, yo creo que eso cambia cuando cumplen los 30 años, pero no estoy segura.
    También tienes razón en que somos los padres los que educamos, y que no valen fisuras entre nosotros, si yo digo blanco, es blanco, y si el padre dice blanco, pues igual, ya hablaremos cuando estemos solos de si hemos hecho lo correcto o no, pero que ellos no se enteren,
    Ya te dije que aquí no necesitamos ni límites ni castigos, mucho diálogo, que ellos sepan que todos los temas tienen cabida en la cena, que escuchamos y hablamos, y que si nos necesitan vamos a estar ahí.
    Un beso preciosa

    ResponderEliminar