Si eres madre de adolescente me entenderás a la perfección...y suspiras como yo... ains...
Si no eres madre de adolescente... ponte en situación....
-Cariño hola no? dame un beso...
-Jo mami que plasta....
-Va cielo, dame un beso....
-Voy.....
y tú te quedas esperando hasta que te cuajas.....
Pasan tres días.... estás cocinando... y de repente te aparece por detrás, te abraza y te da un beso y te dice que te quiere..... y alucinas...
Los adolescentes son así, la adolescencia es así.... un día te aman y al siguiente te odian....
La vergüenza ante las muestras de cariño es generalizada y es lo entendido como "crisis de adolescencia" y es que a veces tienen la sensibilidad a flor de piel y otras parece que carezcan de sentimientos.... y si es chica y está ovulando..... pues ni los buenos días!!!!! Un desarreglo emotivo que te cagas....y las hormonas bailando la macarena.
La adolescencia no se recuerda con felicidad hasta que la pasas... esta frase se la digo hasta la saciedad.... y se me queda mirando con una cara como diciendo... ella no ha pasado por esto ni de coña!!!!
Miestras estás en ella los sentimientos, cambios y la ardúa tarea de encontrarse a si mismo hacen que puedas llegar a odiar lo que te está pasando. Es por ello que como padres nos hemos de poner en su piel en parte.... bueno las madres porque los padres no entienden nada de nada... (en su línea, vamos).
En la adolescencia nuestros hijos dejan de ser exclusivamente nuestros y pasan a ser del resto, sobretodo de los amigos. Sufren una crisis de oposición tremenda porque han de formar un yo diferente al nuestro, necesitan autonomía y una "ciertaindependecia" y les hemos de respetar en su justa medida.
Todo ello hay que sumarle los sentimientos de inseguridad propios por los cambios físicos que padecen y que no van acordes con el crecimiento emocional; y los sentimientos de angustia.... a veces por culpa de los adultos que hay momentos que los tratamos como niños y otros como adultos y eso les descoloca...no se donde está el punto medio.... quizás cuando lo enciuentre mi hija ya será una mujer...
Como madre de adolescente te diré que no vayas de "guachi" con sus amigos, que no cuentes ninguna anécdota de cuando eran pequeños porque no te lo van a perdonar y ya ni te digo si intentas peinarla delante de nadie, sacarle una triste mancha, acomodarle la parka o darle un beso... no te lo van a perdonar JAMAS....(bueno cuando madure ya te habrá perdonado).
A mi se me está haciendo "eterna"... yo no recuerdo me durara tanto.... y lo que siempre digo... pava no lo está, es buena niña y responsable.... pero tiene unos cambios de humor, unos ramalazos a veces.... una poca paciencia y parece la maja vestida todo el día tirada en el sofá móvil en mano.....
Quizás me queje por vicio.... porque seguro que hay madres por ahí que lo pasan peor... FIJO.... pero cada una tiene su cruz....y esta es simplemente la mía.
Mamadedos
Te recuerdo que en la pestaña ADOLESCENCIA puedes encontrar una buena recopilación de post.
Pues... Tal y como lo describes, yo tengo un adolescente en mi casa, que no es otro que el Sr. Especial. Me tiene sin decir nada ni tocar hasta que se le ocurre decir una palabra cariñosa, dar un beso... Y mira que le pido...
ResponderEliminarYo ya voy entrenando... te quiero/te odio, el pan nuestro de cada día. Aunque me gustaría que FP no me quisiese tanto cuando le conviene...
ResponderEliminarMadre mía me estáis asustando las pocas que habláis de adolescencia! Yo tan feliz porque mi bestia mayor ya no es un bebé y se viste sola y me ayuda, y en realidad debería estar cagada por la que se me viene encima :O
ResponderEliminarAqui otra madre de hormonas andantes. ¿Un día dices? ¡Un segundo! Te quieren, y al siguiente te odian. Lo de hola... El pan nuestro de cada día, porque entra directa al baño, y al rato hay que estar llamándola para que salga y venga a comer ¡Ay!
ResponderEliminarLa mía tiene 14 (igual que la tuya creo, ¿No?), y lo que la salva a ella es que tienen un pavazo terrible, y se lo pasa tan bien diciéndolo. Por mí perfecto, porque hay cosas que gracias a eso no quiere hacer, y es muy buena. Pero hay momentos en que te planteas, ¿Madurez? ¿Eso qué es? Aun así, los días buenos me encanta. ¡Estan en plena edad de disfrutar a tope!