La salud en los más pequeños, el bien más preciado

Hace ya días que tenía medio escrito este post, pero me faltaba pulirlo y volverlo a leer, reescribir..... porque hay muchos sentimientos de por medio, porque a veces es difícil expresar con palabras lo que quieres decir, pero hoy me he decidido Venga va, hoy es el día.

Realmente que importante es la salud, sobretodo la de nuestros hijos!!!, pero lo que también es cierto es que a veces damos por hecho que todo va bien, y no nos paramos a pensar en que hay muchas madres sufriendo cada día, cada instante por su hijo o hija que está "malito" (y no me refiero a esas "itis" que se curan con Ibuprofeno), hablo de enfermedades serias.

Por suerte o por desgracia me ha tocado vivir de muy muy cerca una enfermedad en una niña y de verdad os digo que no hay derecho que niños indefensos tengan estas enfermedades; para las madres es como un terremoto que te desmorona pero que te has de recomponer lo más rápido posible porque tu hijo te necesita mas que nunca. Hablo de enfermedades que no tienen curación, pero que en un principio no son letales, por lo que toda la vida estas madres estarán en tensión continua, con el corazón encogido pensando como irá todo.

En concreto, la MAMA de esta niña que os comento ( y pongo mamá en mayúsculas porque es una madre como la copa de un pino, es la mejor madre que esta niña ha podido tener), hace unos meses cuando por desgracia la enfermedad "se descontroló", no os podéis imaginar de qué manera sufrió. Tuve (no se como llamarlo) la "oportunidad" de estar a su lado sin separarme de ella ni de la niña; pero en aquel momento el apoyo era para la madre porque la niña ni se enteraba con tanta medicación. Esa madre que, cada vez que a su hija le daba un "jamacuco" que era cada 50 minutos, se descomponía, la destruía por completo pero ella, pieza a pieza, como si de un lego se tratara, se iba recomponiendo. Y no podía dejarse ir, no podía tardar mucho, porque su hija la necesitaba, y tienes que estar ahí, firme, resistente, al pie del cañón, porque lo es todo para su niña.

Desde aquí mi admiración a todas esas madres que sufren, en concreto, mi admiración hacia ella, esas primeras doce horas que compartimos juntas, sufrimos, lloramos, estuvimos ahí..... aprendí mucho de ti, y nunca te lo he dicho así que aprovecho mi blog para hacerlo.

Te admiro la resistencia física que tienes, tu fuerza emocional (de ella hablamos en muchas ocasiones y no dudes que la tienes y a raudales), admiro cómo llevas el día a día de tu hija, cómo la sacas adelante y como la cuidas, como la tratas sin ponerle más "frenos" de los que su enfermedad ya le pone.

No podía dejar más días sin escribir esto, así que ya "está fet"; en mi blog como en la vida misma, hay días de risas, días de ironías y días de cruda realidad, que no es lo mismo que días de lloros, simplemente que a veces hemos de "tocar con los pies en el suelo" mirar a nuestro alrrededor porque no todo es bello ni maravilloso y dar las gracias de la suerte que tenemos de tener niños sanos.

Un beso a todas esas madres, un beso especial a ti (tu ya sabes quién eres) y uno aún más especial si cabe para esa niña que llena de felicidad a todo el que está a su lado (t'estimo molt).