Pues yo como Heydi en las montañas y va y me entero que hay una nueva "Tribu urbana" que al parecer va en aumento y yo sin enterarme.... así que por si no lo sabes voy a ponerte al día.
En mi época... heavys, rockers, mods y parece ser que hoy en día esto ya no es así... o son minoritarios o ya no llaman la atención.....o mejor dicho... se han transformado.
Las tribus urbanas han mutado, hipsters, pin ups y maridis son quienes pueblan las sinuosas y grisáceas calles de las ciudades... tatuajes, barbas, y con peculiares costumbres en su forma de vida.
Hipsters quizás sea el más conocido..... y tienen su qué y su morbo, y suelen estar hasta buenorros, algunos.
Pero me voy a centrar en esos MARIDIS..... que es curioso la verdad.
Dicen que son los gays a los que les gustan las mujeres.... (curioso), van vestidos con gusto y gastan cierta dejadez en su estilo.
Lucen aparentemente despreocupados y velludos…mera apariencia claro está,porque cada mechón de barba, cada trozo desharrapado de tela, cada detalle en principio mugriento, está profundamente estudiado para ensalzar la heterosexualidad.
Maridis es el nombre de la nueva tribu urbana de hombres heterosexuales que hacen frente a los metrosexuales a golpe de barba, bigote y varonil estética.
Adiós al "macho ibérico de la manada" para hacer suyas ciertas costumbres consideradas como homosexuales.
Hace poco que ‘han salido del armario’ dejándose ver por ciudades y pueblos, y están decididos a quedarse, a no renunciar a sus refinados gustos afeminados ni a sacrificar sus costumbres heterosexuales.
Leo alucinada:
Les gusta madrugar, llevar a sus hijos al colegio o pasear al perro antes de ir a trabajar. Los Maridis tienen profesiones liberales y otras que no lo son; hay Maridis mecánicos e informáticos.
Se pelean con las señoras en la carnicería por el muslo de pollo que van a cocinar después en pequeñas tartaletas con semillas de amapola. También les gusta elegir el detergente con el que lavan su ropa -la más delicada, a mano- y les gusta oler bien: a limpio y puro.... huelen a frescor.
Visitan galerías de arte en busca de pequeñas piezas que puedan comprar y se pueden pasar una hora en la floristería eligiendo las flores que van a realzar la belleza de su nuevo jarrón de diseño nórdico. Tienen inquietudes artísticas como la pintura o la alfarería. Valoran una buena peluquería, les gusta cambiar de peinado y consideran que unas buenas manos dicen mucho de un hombre. Entienden la ópera, no se duermen en el cine viendo un drama curdo y son capaces de renunciar a un partido de fútbol para ir a ver un concierto de piano que les va a hacer llorar (o para acompañar a sus señoras de compras, cosa que también les agrada).
Hacen regalos handmade a sus mujeres el día de San Valentín y a sus mamás el día de la madre, juegan a las muñecas con sus sobrinas y hacen trenzas a sus novias si estas así lo piden. Han visto El tiempo entre costuras y verbalizan que Rubén Cortada está muy bueno pero confían en que Peter Vives es más sano para una relación estable. En esta línea, también aconsejan a sus amigas con qué hombre no se deben volver a acostar.
Esto si que no tiene desperdicio... no fanfarronean.
Les gusta relacionarse con los hombres que no son como ellos, no consideran bestias a los heterosexuales ni florecillas a los gays. No están desubicados, comparten tema de cama con los primeros y refinados gustos con los segundos.
Sus parejas, por lo general, son niñas monas con toques rebeldes que denotan cierta personalidad. Los Maridis no entran en si ellas llevan demasiado escote ni permiten que les insinúen que no han acertado con su atuendo. Son conscientes de que hay féminas que conducen mejor que ellos y que el cromosoma XY no les hace artistas de la taladradora. No les importa que ellas lleven los pantalones fuera de la cama y asimilan con facilidad que hay mujeres con más c&%!@·s que ellos.
No son unos calzonazos, sencillamente saben que el amor es cosa de dos y que el respeto es la base de toda convivencia aunque no encuentran elegante invitarles siempre a cenar y retirarles la silla cuando van a sentarse. Admiten sin tapujos que están enamorados hasta la médula pero no se dejan mangonear.
DEFINITIVAMENTE Son los hombres perfectos
Unas pistas para identificarlos.... sobretodo a las que aún estáis en busca y captura....
- Son heterosexuales de aspecto varonil.
- Su estilo es clásico con numerosísimas concesiones a la tendencia.
- Se les reconoce en galerías y museos porque nunca van acompañados de otros hombres.
- Se dejan ver en espacios gays.
- Piden que pinchen Raffaella Carrá en las discotecas.
- Hacen la compra, cocinan, planchan y compran flores.
- Opinan sobre la belleza de otros hombres.
- Les gusta el fútbol.
- Lloran en público.
- No conocen los prejuicios.
Mamadedos
PD: Queridas hijas mías.. muy posiblemente todo evolucionará... pero busca un tío así para compartir el resto de tus días... no te arrepentirás.
si es verdad que esa especie existe, voy a enviar copia de tu post a LaMediana, no vaya a ser que sean pocos y llegue tarde a encontrar uno así jajajajajajaa
ResponderEliminarbss
Hay cosas que hasta parecía nque hablabas de mi marido, luego no , comparto y se lo mandare, un beso grande
ResponderEliminarMe encanta esto de los maridis.. jaja por el look y su obsesión por la limpieza el mío va encaminado, pero veo que le faltan cosas importantes como lo de las manualidades y tema cocina.
ResponderEliminarLe iré enviando indirectas a ver si quiere unirse a esta tribu.. a ver si cuela
Pensaba que te habías sacado de la chistera un nuevo mote y categoría. Pero vamos, dónde hay que firmar para tener uno de estos??
ResponderEliminarY mira que no me quejo mucho del mío, que no es ni marido, pero... Joer, qué bien pintan estos maridis.
Alucino, no había oído ese término en mi vida!!
ResponderEliminarPuedes hacer una sección sobre tribus urbanas, yo aún estoy procesando eso de Hipster y también sé que están los hippies, ¡hasta ahí llega mi conocimiento jaja!
Y donde están? Porque yo quiero uno!!!!
ResponderEliminar¿Esto qué es? ¿Y dónde dices que se encargan? ¡Uy,maridis! La verdad es que el nombre no me gusta ni mijita pero tienen tantas virtudes...
ResponderEliminarTia ¿pero esto que es? ¿en serio? jajajaja es la primera vez que lo leo/oigo... ni pajolera idea de su existencia..jajaja
ResponderEliminarEstás al día eh?
Un beso!
Pongame cuarto y mitad de uno de esos... Y, sobre todo, que acertada elección de las fotografías, con mi "reguleras" preferido entre ellos!!!!
ResponderEliminarO sea, que si tu marido no es homófobo, ni machista, ni un bruto inculto, si tiene modales e intereses diversos, si es padre con todas las de la ley y se hace corresponsable de la crianza de sus hijos y les quiere, si es lo que debería (ya veo por los comentarios que no) ser un hombre normal en pleno siglo XXI, entonces es de una tribu urbana, que por definición es para unos pocos o unos cuantos y deja al resto de lado. Pues no mola, no me gusta, es como cuando David Lay va a la contra del término "padrazo". A ver si dejamos de idealizar y babear por lo que debería ser lo mínimo. Que ya está bien de hacer monumentos mientras nosotras tenemos que ser superwomans top models y ni las gracias. Hasta el moño me habéis pillado hoy, que me parece muy fuerte todo lo que implica que alguien se haya atrevido a decir que son los "gays" que les gustan las mujeres. O sea que todo lo femenino que normalmente es un estereotipo negativo de debilidad, pasa transformado a TODOS los gays (dejadme que me ría, tengo muchos amigos gays y los hay de todos los colores), donde es a veces el hombre ideal si no fuera porque le gustan los hombres (para las mujeres) a veces lo peor, un traidor afeminado que es vapuleado (por los machos), y ahora resulta que se lo ponemos como etiqueta a los heterosexuales y es lo más... POR FAVOR!!! Hasta el moño de estereotipos y convenciones de género!
ResponderEliminar